lunes, 18 de julio de 2011

Viernes 13

Muchos han dicho que cuando el treceavo día del mes cae en viernes reina el caos, la discordia y la mala suerte. En ocasiones he escuchado que esto es falso, que es un error tener por funesta esta fecha y que es, en cambio, el jueves (o incluso otros señalan al miércoles) el día de mala suerte. Como es bien sabido, esta superstición proviene de aquel hecho que relaciona a la captura y tortura de los Templarios con un viernes 13, día en que iniciarían los juicios contra Jaques de Molay, último gran maestre de la orden y que siete años después, poco antes de morir, maldijo a nuestro señor el Papa Clemente V junto a Felipe IV “El Hermoso”. Sin embargo, muchos ignoran la verdadera causa que le otorgó desgracia a este día; me refiero a la trágica y olvidada historia de Jean Pierrot, El Templario Medio o Pierrot el Mediano; como sea que se le llame, fue uno de los tantos seguidores de Molay. Acorde a las pocas referencias que mencionan este evento, Pierrot el Medio cayó muerto en vida al ser el testigo silencioso del instante en que su propio maestro, galante y seductor por naturaleza, poseía desenfrenadamente entre sus manos las amplias caderas de la amada de Pierrot. Tras ello, el Mediano entró en un profundo estado de silencio, dejó de comer y beber, y no profirió palabra alguna hasta el momento en que fue procesado por la autoridad eclesiástica. Sumergido en el abismo de una quietud infinita fue considerado un poseído y condenado a muerte por la Santa Inquisición como claro ejemplo de herejía entre los templarios. La noche del viernes 13 de 1307 maldijo entre los fuegos de la hoguera, junto a sus captores, a Molay y a la humanidad entera por privarle de la felicidad. Fue de hecho, Pierrot y no Molay quien injurió y sentenció a Clemente V y a Felipe “El Hermoso” profetizando sus muertes siete años después de tal acontecimiento. La mayoría desconoce éste evento como la verdadera causa de que todo decimotercer día del mes que acontezca en viernes sea aciago, pero no sólo ignoran esto, también ha de saberse que el treceavo día siempre será maldito, sin importar si es venusino, sabatino o dominical; incluso algunos alegan que esto siempre ha sido así y que el trágico viernes 13 de Pierrot es tan sólo una consecuencia y no el origen del infortunio para este día. Esto lo atestiguaron los antiguos sabios renacentistas en todos y cada uno de sus textos perdidos.

miércoles, 15 de septiembre de 2010

Sobre el Egipán

Pese a la tradición usual que suele ver a los egipanes como seres fantásticos mitad cabra mitad humano, yo me atrevo a afirmar que se equivoca. Por el contrario, un egipán consiste –como lo afirmaron sólo unos pocos que tuvieron el privilegio de observarlos y poder seguir con vida-, en un ser real y existente con cuerpo de simio sin vello y cara de hombre retrasado. Son seres largos, extremadamente fuertes y de respiración lenta y áspera. Criaturas solitarias de aspecto triste que a pesar de parecer torpes en movimiento, son animalejos de extremo cuidado. El egipán disfruta extasiado del gesto agónico pintado en el rostro de su presa; todo esfuerzo humano será inútil cuando seas cogido del cuello por un egipán, entre la resistencia que ofrezcas escucharás su risa de imbécil retardado babeante y borrosamente lo contemplarás danzando de felicidad. Lo que no sabrás una vez muerto es que el egipán tuvo una eyaculación durante el último instante en el que te arrebató la vida. Cabe añadir que mientras más te opongas a la eminente muerte, mayor será el placer experimentado por estas bestias.

Serotideo

Serotideo: dícese de todo eso
que siendo es en tanto que es eso que es,
que es lo que fue, es y será yo expreso
Eso serotideo es ¿o que no crees?
Devenido sido lo que será. ¡Eso!
Incluso lo que no es, serotideo es.

martes, 14 de septiembre de 2010

Calambur(es):

¡Oh enanos de bellas mujeres! Esta red es de aquí, yo se los advierto.


¡Oh! En anos de bellas mujeres estaré, desde aquí yo se los advierto.

El cojo...

Yo; cojo siempre en calle
y de puro alcohol vivo.
Tú; corriente en el parque
te paseas coqueta.
Con gusto voy y te cojo,
fuertes fueron tus gritos.
Sin voltear huyes de mí.
de nuevo cojo y sin ti…